Director: Julio Médem
Guion: Julio Médem
Vestuario: Sylvia Imbert
Reparto: Úrsula Corberó, Álvaro Cervantes, Najwa Nimri, Patricia López Arnaiz, Daniel Grao, Joaquín Furriel, Maria Molins, Emilio Gutiérrez Caba, Luisa Gavasa, Josep Maria Pou, Ángela Molina, Lucía Delgado, Susana Garrote, Mariano Venanci, Luka Peros, Sergio Castellanos
Productora:Arcadia Motion PicturesDistribuidora: Diamond Films
Año: 2018
Estreno En España: 31/10/18
Titulo Original: El Árbol De La Vida
Género: Drama, Thriller
Duración: 130 Minutos
ARGUMENTO:
Rebeca (Úrsula Corberó) y Marc (Álvaro Cervantes) son una joven pareja que viaja hasta un antiguo caserío que perteneció a la familia de Marc para escribir su historia en común. Durante esos días recompondrán un gran árbol genealógico con 25 años de relaciones de amor, desamor, sexo, locura, celos e infidelidades, que oculta un profundo misterio que marcó sus vidas y cuyo descubrimiento pondrá en peligro su propia historia de amor.
Fuente: Diamond Films
CRÍTICA:
Hace ya casi 30 años un joven director, Julio Medem, debutaba en el cine con Vacas una interesante película que vio el visto bueno de la crítica y del publico especializado. Con su segundo trabajo, La Ardilla Roja, volvió a repetir formula y un éxito moderado pero a partir de ahí empezó a tener altibajos en su filmografía y por eso esperábamos con ganas su nuevo trabajo para comprobar si volvíamos a descubrir al Medem de los inicios. El Árbol De La Sangre no consigue convencer y por desgracia nos llevamos otra decepción ante una película confusa, aburrida y muy, muy larga.
El Árbol De La Sangre nos presenta a Marc y Rebeca una pareja que quieren unir lazos y para eso viajan al caserío familiar de Rebeca para escribir su historias y estas se tienen que complementar. Rebeca es vasca y Marc catalán pero están unidos por un pasado que tienen que descubrir. Dos familias totalmente diferentes pero que están unidas por la desgracia y un oscuro secreto. Marc y Rebeca están dispuestos a que su amor no se rompa y se meten de lleno en contarse su pasado hasta unir cabos.
Poco bueno se puede decir de El Árbol De La Sangre si exceptuamos que la película sirve para demostrar que Julio Medem es un buen director algo que ya sabíamos. Una película excesiva y muy alargada que a los quince minutos ya nos hemos liado ante tanto personaje y la confusión es tal que ya desconectamos sobre lo que nos cuenta.
El Árbol De La Sangre está llena de intrigas, pasiones, secretos y sexo, mucho sexo que inunda la pantalla muchas veces sin motivo aparente que solo sirve para recrearse en una historia que parece no llegar a ningún sitio. Una historia donde los flashbacks se confunden en los tiempos descolocando por completo, uno no sabe muy bien si es fallo de guión o montaje pero todo es ilógico o surrealista en la película.
Tampoco hay que añadir mucho más a una película que naufraga en todos los sentidos y solo es loable la dirección de Julio Medem y la música de Lucas Vidal, todo lo demás, actores incluidos, merecen ser olvidables
Hace ya casi 30 años un joven director, Julio Medem, debutaba en el cine con Vacas una interesante película que vio el visto bueno de la crítica y del publico especializado. Con su segundo trabajo, La Ardilla Roja, volvió a repetir formula y un éxito moderado pero a partir de ahí empezó a tener altibajos en su filmografía y por eso esperábamos con ganas su nuevo trabajo para comprobar si volvíamos a descubrir al Medem de los inicios. El Árbol De La Sangre no consigue convencer y por desgracia nos llevamos otra decepción ante una película confusa, aburrida y muy, muy larga.
El Árbol De La Sangre nos presenta a Marc y Rebeca una pareja que quieren unir lazos y para eso viajan al caserío familiar de Rebeca para escribir su historias y estas se tienen que complementar. Rebeca es vasca y Marc catalán pero están unidos por un pasado que tienen que descubrir. Dos familias totalmente diferentes pero que están unidas por la desgracia y un oscuro secreto. Marc y Rebeca están dispuestos a que su amor no se rompa y se meten de lleno en contarse su pasado hasta unir cabos.
Poco bueno se puede decir de El Árbol De La Sangre si exceptuamos que la película sirve para demostrar que Julio Medem es un buen director algo que ya sabíamos. Una película excesiva y muy alargada que a los quince minutos ya nos hemos liado ante tanto personaje y la confusión es tal que ya desconectamos sobre lo que nos cuenta.
El Árbol De La Sangre está llena de intrigas, pasiones, secretos y sexo, mucho sexo que inunda la pantalla muchas veces sin motivo aparente que solo sirve para recrearse en una historia que parece no llegar a ningún sitio. Una historia donde los flashbacks se confunden en los tiempos descolocando por completo, uno no sabe muy bien si es fallo de guión o montaje pero todo es ilógico o surrealista en la película.
Tampoco hay que añadir mucho más a una película que naufraga en todos los sentidos y solo es loable la dirección de Julio Medem y la música de Lucas Vidal, todo lo demás, actores incluidos, merecen ser olvidables
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| EL ÁRBOL DE LA SANGRE 2018 |
NOTA: 3,5/10
RECOMENDADA PARA
Público muy amante del cine de Julio Medem. La dirección del director vasco. Algunos escenarios naturales. La banda sonora
Público muy amante del cine de Julio Medem. La dirección del director vasco. Algunos escenarios naturales. La banda sonora
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| EL ÁRBOL DE LA SANGRE 2018 |
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